El diálogo de los opuestos

Maja Bajevic inaugura su presencia individual en el panorama artístico español a través de la muestra Continuará, concebida a propósito para la ocasión y que se revela como una materialización de la nube política y social que planea sobre prácticamente todo el planeta en la actualidad. La artista permanece fiel a la línea de actuación que ha dirigido su obra: el estudio de la dualidad del comportamiento humano como rasgo definitorio de éste. Así Bajevic, no presenta una reacción, una propuesta o un firme posicionamiento político-social ante una realidad como la actual, sino que se detiene y plantea una reflexión de algo que va más allá de lo que somos en estos momentos: lo que hemos sido, lo que seremos y cómo nos relacionamos con ello.

Este planteamiento parte de una base: “Despertar a la bella durmiente”, aquí encarnada por lo etéreo de la arquitectura que acoge su muestra, el Palacio de Cristal del Parque del Retiro, que se muestra como materialización de una sociedad que mira hacia sí misma, dormida y arrogante, que hemos de comenzar a despertar. El discurso se estructura en base a la recopilación de eslóganes políticos y económicos, concebidos como concentración de las ideas de un tiempo, al mismo que como objetos inmateriales que participan del flujo y el vaivén de la historia. Éstos son garabateados sobre el polvo y vueltos a borrar – en la performance que acompaña a la exposición –, archivados de manera imperecedera, recitados musicalmente y proyectados sobre el efímero vapor nocturno. Así, el planteamiento de Bajevic se pone en movimiento a través del diálogo entre los opuestos, del recorrido de los seres humanos desde un extremo al otro a través de la historia. La artista evidencia esta idea del devenir histórico, de la masa alterable de un día para otro, a través de los acontecimientos recogidos en su film Wende – traducido como “giro” o “vuelta” –. Así se confirma, paradójicamente, el “cambio” como la única categoría inalterable de una historia concebida como dinámica, en construcción por esa humanidad encaramada a los inestables andamios que marcan metafóricamente la exposición y cuya labor tiene lugar “bajo su responsabilidad”. Pero Bajevic no sólo basa su muestra en establecer un concepto definitorio de la historia y la actividad político-social de los hombres y las mujeres: haciendo volverse a la historia sobre sí misma pretende reflexionar sobre la construcción conceptual de ésta, sobre la forma en qué los seres humanos no sólo la erigimos con hechos, sino con palabras y narraciones. Nuevamente Bajevic pone de manifiesto la dualidad de lo material y lo inmaterial, de lo estático y lo dinámico…, en la que, los tan despreciados “azar” y “absurdo”, también están presentes como agentes activos en el devenir de las cosas y del propio arte.

Esta polaridad queda manifiesta en la propia creación artística, en su sentido material y teórico. La puesta en escena de su discurso se realiza a través de una combinación de medios y técnicas, materiales e inmateriales, – la performance, la música, la investigación, la creación del archivo, el video y la construcción de lugares y objetos como el monumento o el andamio - que se sustentan por un manifiesto teórico marcado por una mirada inteligente y reflexiva sobre una realidad como la propia actuación humana, e inherentemente política. De esta manera, la muestra, considerada en su dimensión artística, es un auténtico paradigma de la apertura del arte contemporáneo y de la riqueza que éste puede ofrecer.

La obra de Maja Bajevic sugiere algo a lo que raramente damos espacio en un mundo de hechos y relaciones polarizadas, marcadas muchas veces por el sí o el no rotundos. Esto es, la relatividad y lo complejo de aquello en lo que trabajamos día a día inconscientemente: la Historia y las historias.

Continuará, de Maja Bajevic.

MNCARS – Palacio de Cristal del Parque del Retiro, Madrid.

Por Sandra Gómez Todó